Una propuesta creativa de Beatríz Serram que une literatura, artesanía y valores sociales.
Por Redacción | RADIO LAS PALMAS
En un tiempo dominado por la inmediatez, la creadora Beatriz Serram reivindica la calma y la imaginación como herramientas educativas a través de los muñecuentos, un proyecto que presentó en el programa Punto de Partida, dirigido por Rita Sánchez en Radio Las Palmas. Escritora de cuentos infantiles y artesana reconocida, Serram compartió en este espacio radiofónico el origen y la filosofía de una iniciativa que transforma historias en muñecos pensados para emocionar, educar y acompañar.
La escritura fue el primer refugio creativo de Beatriz Serram, pero con el tiempo las palabras se materializaron a través de muñecos y sonido. De ese impulso nacieron los muñecuentos, un proyecto singular que une literatura infantil, artesanía y narración oral en una propuesta pensada para tocar emociones y acompañar procesos vitales desde la infancia hasta la edad adulta.
Serram, escritora de cuentos infantiles y artesana reconocida por la Federación de Artesanos de Canarias, ha desarrollado un formato propio en el que cada muñeco de trapo guarda una historia creada a medida. El cuento acompaña físicamente al personaje y se completa con un código QR que permite escucharlo narrado con voz infantil. La experiencia no se limita a la lectura. Invita a mirar, tocar y escuchar, a establecer un vínculo afectivo con el relato.
El origen creativo
El origen del proyecto está ligado a la necesidad de dar protagonismo a los personajes que habían nacido en sus libros. Sacarlos de las páginas fue una forma de prolongar la vida de esas historias y de acercarlas a quienes las reciben. El proceso artesanal, iniciado sin formación previa, se convirtió también en una vía de calma y concentración, un espacio donde la creación manual y la escritura avanzan de la mano.
Cada muñecuento responde a una intención clara. Los relatos abordan valores que Serram considera esenciales y que, a su juicio, no siempre encuentran espacio suficiente. La inclusión, el respeto a la diversidad, la empatía o el cuidado de los animales aparecen de forma natural en historias protagonizadas por niños y niñas con realidades diversas. Hay cuentos que hablan de discapacidad, de complejos infantiles o de abandono, siempre desde una mirada cercana y comprensible, pensada para acompañar sin imponer.
Raíz y valores
El trabajo por encargo ocupa un lugar central en su labor creativa. Familias de distintas edades solicitan muñecuentos personalizados que recogen gustos, inquietudes y experiencias personales. A partir de esa información, Serram construye un relato que busca ofrecer un mensaje positivo, a veces casi imperceptible, que ayude a quien lo recibe a reconocerse y sentirse acompañado.
Aunque nació en Madrid, su vida y su obra están profundamente vinculadas a Canarias. Tras décadas residiendo en las Islas, muchos de sus cuentos incorporan paisajes, rutas y referencias culturales del Archipiélago. Bandama, el Jardín Canario o antiguos enclaves aborígenes se convierten en escenarios de aventuras que conectan la fantasía con el territorio y refuerzan el sentimiento de pertenencia.
La creadora mantiene una posición firme sobre los límites de su trabajo. No concibe muñecos que fomenten la violencia, el miedo o la humillación. Cada pieza nace con una intención humanista, pensada para sumar y no para excluir. Esa coherencia atraviesa todo el proyecto y explica el vínculo emocional que establece con cada creación, hasta el punto de despedirse de ellas con un gesto de afecto cuando encuentran nuevo hogar.
Los muñecuentos no son solo objetos artesanales ni cuentos ilustrados. Son relatos encarnados que buscan devolver a la infancia el valor de escuchar y sentir historias con calma. En un tiempo dominado por la inmediatez, la propuesta de Beatriz Serram reivindica la imaginación como herramienta educativa y la creatividad como acto de cuidado.
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