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Actualizado: Martes, 23 de Diciembre de 2025
La artista reflexiona sobre el paso del tiempo, el trabajo y la discriminación por edad.
Por Redacción | RADIO LAS PALMAS
La actriz y cantante Charo Reina ha pasado por los micrófonos de Arrasando, en una entrevista llevada a cabo por Kiko Blanki en Radio Las Palmas, enmarcada en el especial navideño del programa. Reconocida recientemente con el premio a la Mejor Interpretación Femenina en el Festival Terror Film de Teror, la artista afronta una etapa marcada por la actividad constante, el compromiso contra el edadismo y una mirada vital serena. En este espacio repasa su trayectoria, sus nuevos proyectos y cómo vive hoy la Navidad tras una vida intensa sobre los escenarios.
Vivir del talento
Ese premio reciente en Teror ha tenido un significado especial para ti. ¿Por qué?
Ha sido una alegría enorme porque no se trata solo de un reconocimiento profesional, sino emocional. Teror es un lugar al que quiero mucho y al que siempre vuelvo cuando estoy en Gran Canaria. Recibir allí un premio, en un festival con tanto prestigio, me conecta con mi historia personal y con mi fe, con la Virgen del Pino, que forma parte de mi vida desde hace años.
No paras de trabajar. ¿En qué momento profesional te encuentras ahora mismo?
Estoy en una etapa muy activa y muy ilusionante. Acabo de llegar de Madrid, donde he estado grabando y participando en la asamblea de la Academia de Cine, preparando todo lo relacionado con los próximos Goya. Me siento afortunada porque sigo creando, aprendiendo y formando parte de proyectos que me estimulan.
Estás preparando un espectáculo de zarzuela con orquesta en directo. ¿Qué tiene de especial esta propuesta?
Es un proyecto precioso porque une tradición y puesta en escena cuidada. Voy a producirlo y también a estar sobre el escenario, acompañada por una orquesta en directo y grandes voces del género. Queremos recorrer los grandes títulos de la zarzuela y llevarlos a distintos lugares, contando con orquestas municipales, acercando este patrimonio musical al público.
«El edadismo es una discriminación que hay que nombrar para combatirla»
Tu implicación contra el edadismo ocupa un lugar central en tu discurso. ¿Por qué es tan importante visibilizarlo?
Porque es una de las grandes discriminaciones silenciosas. No afecta solo a las personas mayores, también a jóvenes, mujeres, artistas y colectivos como el LGTBI. Cuando se cumple cierta edad parece que ya no se puede aportar, y eso es falso. Nombrarlo es el primer paso para cambiarlo.
Estás preparando un documental sobre este tema. ¿Qué pretendes contar con él?
Quiero mostrar realidades que no se ven, dar voz a quienes han sido apartados cuando aún tenían mucho que ofrecer. Será un documental muy humano, con testimonios reales, y además lo dirigiré yo misma. Es una manera de unir mi profesión con un compromiso social que siento como propio.
También impulsas pódcast y una futura escuela de teatro. ¿Qué papel juegan en esta lucha?
Los pódcast son conversaciones directas con personas conocidas que ayudan a concienciar desde la cercanía. La escuela de teatro será un espacio de apoyo y formación para artistas y colectivos afectados por el edadismo. Crear oportunidades también es una forma de combatir la discriminación.
Disfrutar con calma
Dices que te levantas muy temprano para llegar a todo. ¿La disciplina sigue siendo clave?
Absolutamente. Me levanto a las seis de la mañana porque el tiempo es oro. Nada llega solo, todo requiere esfuerzo y constancia. Pero cuando haces lo que te gusta, el cansancio se lleva mejor y el trabajo tiene sentido.
Las Navidades han cambiado mucho para ti. ¿Cómo las vives ahora?
Las vivo con más calma. Ya no adorno la casa como antes ni necesito grandes celebraciones. Hay ausencias que pesan, pero prefiero recordarlas con alegría. Paso la Nochebuena en familia y el fin de año lo recibo frente al mar, mojándome los pies para dejar atrás lo malo y atraer lo bueno.
Con 65 años te defines como una mujer joven. ¿Qué significa eso hoy para ti?
Significa aceptar la vida tal y como es. He vivido intensamente, he disfrutado de momentos irrepetibles y ahora valoro la tranquilidad. Sigo creyendo, sigo yendo a la iglesia, sigo trabajando, pero todo desde un lugar más sereno y consciente.
La entrevista deja el retrato de una mujer en plenitud, consciente de su recorrido y comprometida con el presente. Charo Reina combina memoria, trabajo y activismo en una etapa donde la experiencia no resta, sino que suma. Su discurso invita a mirar el paso del tiempo sin miedo, a reivindicar el valor de seguir creando y a entender la madurez como un espacio de libertad y sentido.
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