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Actualizado: Jueves, 05 de Junio de 2025
ENTREVISTA | Tras su destacada etapa en el FC Orenburg y con su contrato finalizado, el técnico canario David Deogracia repasa su trayectoria internacional.
David Deogracia Márquez (Las Palmas de Gran Canaria, 1973) representa uno de los nombres más respetados del banquillo canario más allá de nuestras fronteras. Tras una carrera internacional que lo ha llevado por Tailandia, Marruecos, Bielorrusia y Ghana, su última hazaña llegó en la Premier League rusa, donde logró salvar al FC Orenburg del descenso pese a haber asumido el equipo colista.
Deogracia conversó con Radio Las Palmas Fútbol Club, bajo la dirección de Carlos Santana, sobre su experiencia, sus valores y sus aspiraciones, incluida la posibilidad de volver algún día a entrenar en casa.
¿Cuál fue tu camino hasta llegar a Rusia? "Empecé en el Huracán, después pasé por la base de la UD Las Palmas, luego entrené en Tailandia, Marruecos (donde fuimos campeones con el Mogreb de Tetuán), Bielorrusia (con el Dinamo Brest, cuya academia llegó a estar entre las seis mejores del mundo según la FIFA), y estuve también en Ghana antes de llegar a Orenburg. Han sido 11 años fuera de España, formándome en contextos muy distintos".
¿Cómo se dio tu llegada al primer equipo del Orenburg? "Yo ya estaba trabajando en la base del club y me ofrecieron subir al primer equipo. Pensé que sería algo temporal, unos cuantos partidos, mientras encontraban a otro entrenador. Pero tanto el director deportivo como el presidente me dijeron que querían que continuara. El equipo tenía solo un punto y estaba en el último lugar. Me dijeron que si lográbamos salvarlo, el contrato se renovaba automáticamente. Lo logramos, y aquí estoy".
¿A pesar de esa renovación, pediste una reunión? "Sí, aunque el contrato se renovó, yo necesitaba mirarles a los ojos. Les dije que si creían que debía venir otro entrenador, no había problema. Pero me respondieron que estaban contentísimos conmigo y que querían que siguiera. Eso me dio todavía más fuerza para preparar otra temporada más".
«Tienes que entender qué fútbol quiere tu club y tu afición»
¿Cómo viviste esa lucha por la salvación? "Con mucha presión, claro. Tuvimos un calendario inicial durísimo, pero logramos ganar a dos grandes del fútbol ruso como son el Zenit y al Lokomotiv. Eso nos dio moral y credibilidad. Trabajamos mucho la solidez defensiva, porque cuando estás abajo, cada gol encajado duele el doble. El último partido fue de infarto: empatamos y nos salvamos con 31 puntos. El estadio explotó de alegría".
¿Qué has aprendido de entrenar en tantos países? "A adaptarme. No solo al clima, que cambia radicalmente, sino también a la cultura futbolística y social. En Bielorrusia o Rusia, los jugadores son serios, disciplinados, muy respetuosos. Tienes que entender qué fútbol quiere tu club y tu afición. En Orenburg, por ejemplo, prefieren transiciones rápidas y verticalidad, no posesiones eternas. Hay que saber equilibrar lo que ellos desean con tu estilo personal".
¿Cómo es la vida en Rusia en medio del contexto geopolítico actual? "Sorprendentemente normal. En Orenburg estamos muy lejos de las zonas de conflicto. Vivimos, entrenamos y jugamos como en cualquier ciudad. Lo único que afecta es que, cuando jugamos en zonas cercanas a la frontera, tenemos que aterrizar en ciudades más lejanas y hacer largas horas en guagua. Pero fuera de eso, hacemos vida cotidiana".
«No nos creemos lo suficientemente buenos»
¿Tienes contacto con el fútbol español? ¿Sigues a la UD Las Palmas? "Sí, cuando el horario me lo permite, claro. Allí tenemos cuatro o cinco horas más. Siempre que puedo veo los partidos, sobre todo con mi preparador físico, Armiche, que también es canario. Uno nunca deja de ser aficionado del equipo de su tierra.
¿Te gustaría volver algún día a entrenar en Las Palmas? "Sería un honor. Pero ahora mismo me siento muy agradecido con el club que apostó por mí sin conocerme. Me dieron la oportunidad y quiero devolverles la confianza. Soy una persona de valores y, de momento, mi sitio está aquí".
¿Cómo evalúas el papel de los entrenadores canarios? ¿Tienen que salir fuera para hacerse un nombre? "A veces no nos creemos lo suficientemente buenos. Pero los entrenadores canarios estamos muy bien preparados. Tenemos una forma de entender el fútbol estética y combinativa. Aquí fuera nos valoran mucho. Lo que falta son más oportunidades en casa, porque pocas veces se apuesta por nosotros".
Esta entrevista a David Deogracia se realizó el 10 de junio de 2024 (disponible en Youtube e Ivoox). En la actualidad, según fuentes consultadas, no dirige a ningún equipo tras finalizar su contrato el pasado 3 de octubre de 2024. A sus 52 años, mantiene una proyección en ascenso que le permitirá seguir llevando el nombre de Canarias allá donde le toque demostrar su talento.
Quién sabe, quizá en estos tiempos de cambio y búsqueda de entrenadores, sea el momento para que David Deogracia se haga cargo del banquillo de la UD Las Palmas en la Liga Hypermotion, cumpliendo así con el sueño de muchos y concretando su esperado regreso al equipo grancanario.
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